Ana Chocano

Iniciemos el camino de la recuperación

La crisis sanitaria producido por el Covid-19 está siendo muy cruel y difícil de combatir por parte de las autoridades, el sector sanitario y la sociedad en general. La estamos sufriendo en muchos aspectos, pero quiero poner de relieve nuestro sector, el de la construcción. Debemos ser uno de los motores de la recuperación económica de nuestro país. Y debemos serlo desde ya; mientras luchamos contra la pandemia. Hemos sido respetuosos con las decisiones impuestas, acatándolas aun cuando no se nos ha consultado. No las hemos discutido en el fondo, aunque si hemos manifestado nuestro desacuerdo en la forma. Sobre todo, por la falta de información. Por la precipitación en la comunicación de las decisiones. Por la imposición de parar la actividad totalmente un domingo a las 10 de la noche, y la autorización de volver parcialmente, de nuevo a falta de muy pocas horas de empezar la jornada.

Un sector que en condiciones de normalidad supone un 10% del PIB del país, se merece más respeto. Nuestros trabajadores y nuestras empresas, que serán protagonistas en la reactivación de la economía, debían haber estado más presentes en la toma de decisiones, o al menos en la forma de ejecutarlas. Para volver a ser productivos necesitamos que las administraciones nos tengan en cuenta, y que si no nos apoyan como deberían, al menos dejen de ponernos trabas en el acceso al material de seguridad para nuestros trabajadores, en el acceso a la financiación que tanto anuncian pero que no llega y en torno a toda la maraña legal que se está generando, que a menudo dificulta más que ayuda al desarrollo de nuestra actividad: el diseño y la construcción de infraestructuras.

No necesitamos recibir subvenciones, necesitamos que nos permitan trabajar. Pero en estos momentos, la financiación es clave. Las empresas necesitamos soporte financiero para hacer frente a nuestros gastos, en un escenario donde la ejecución de obra se ha visto ralentizada, y por tanto disminuida la producción, sin que ello haya implicado una reducción de nuestros costes. Necesitamos medidas extraordinarias de apoyo y las necesitamos ya.

Es necesario reactivar la licitación pública con carácter inmediato. Más de un mes sin tramitar licitaciones van a traer una nueva paralización en la conservación y construcción de infraestructuras que tendrán consecuencias a lo largo de todo el año. Iniciemos ya el camino de la recuperación.