Cuatro tendencias que marcarán el futuro de los supermercados en 2023

El 2022 ha sido un año de numerosos cambios para el consumo. De cara a este nuevo año, hemos descubierto las principales tendencias que marcarán el próximo año para el sector de los supermercados y que cambiarán la forma de compra entre los consumidores, adaptándose a las nuevas necesidades y demandas en el sector.

Año tras año, la demanda de la compra a domicilio continúa aumentando. Así, cada vez son más los consumidores que se decantan por evitar desplazarse al supermercado para recibir en casa sus compras. Por ello, tras un 2022 marcado por la inflación, la primera tendencia que marcará el rumbo del sector en este año serán las entregas colaborativas. En concreto, los supermercados encuentran en este tipo de entregas una forma de rentabilizar los envíos de última milla y la reducción de costes que supone contar con un operador exclusivo para este servicio.

Gracias al funcionamiento de este modelo, las plataformas de reparto colaborativo, como Shopopop, que funciona mediante la entrega de sus productos a través de particulares que aprovechan sus desplazamientos habituales, se permite el ahorro, una mayor rentabilización de la capacidad operativa de los supermercados y un mejor servicio y flexibilidad para los clientes, con entregas puntuales programadas y sin límites por franja horaria.

Tanto para mejorar la experiencia del cliente como la gestión de sus existencias, otra de las tendencias para el 2023 será el uso de la inteligencia artificial. Los robots son capaces de encontrar más rápido y fácilmente las demandas de los clientes, mientras les ofrecen recomendaciones personalizadas. En este sentido, de igual forma que cada día vemos más restaurantes atendidos por estos autómatas, también nos encontraremos con estos por los pasillos del supermercado para que nos ayuden en la compra diaria de alimentos.

Además, esta solución permite optimizar el tiempo empleado en tareas, siendo capaces de detectar la rotura de los stocks, realizar tareas de reposición, además de ofrecer información exacta para los momentos en los que es necesario recolocar productos. Con ello, de contar con robots, los supermercados son capaces de ofrecer una experiencia de una mayor calidad a todos los clientes que acuden a las superficies.

Ligado a ello, durante 2023, la automatización en procesos y servicios estará al alza y veremos una mayor transformación en este sentido que favorecerá la mejora de la experiencia de los clientes. Por ejemplo, cada vez son más los supermercados e hipermercados que disponen de cajas de autocobro, en las que los propios clientes pueden ahorrarse las esperas en las colas y así optimizar el tiempo que emplean en otras tareas de su día a día.

Sin embargo, en un entorno de consumo en el que se busca cada vez una mayor comodidad, estas superficies buscan la manera de que el cliente goce de la mejor experiencia, instaurando tecnologías que permitan que este pueda incluso acudir a hacer la compra sin necesidad de llevar encima la cartera o la tarjeta de crédito. El desarrollo de procesos de automatización que mejoren la experiencia física del cliente ya es una realidad que se está instaurando cada día a más velocidad.

Por otro lado, tal y como reflejan datos del Índice Sectorial Sobre la Sostenibilidad, elaborado por Kantar, el 97% de las personas de todo el mundo está preparado para tomar medidas para vivir un estilo de vida más sostenible. Esto pasa por los supermercados, superficies a las que los clientes acuden regularmente y que son clave para su estilo de vida.

Así, a pesar de la naturaleza digital de la mayoría de las tendencias en el sector retail y, concretamente, en los supermercados, otra de las tendencias que marcarán 2023 se aleja de la tecnología y está encaminada a la ampliación de productos ecológicos y de proximidad que cumplan con los códigos éticos que demandan cada vez más consumidores. Esto va en línea con la afirmación de la consultora Bain & Company, que apunta que el 80% de los consumidores europeos se preocupa por la sostenibilidad.

Además, en los últimos años se ha venido registrando un creciente interés por aquellos supermercados sostenibles y respetuosos con el medio ambiente. De esta forma, ya se está observando cómo los clientes tienen en cuenta el compromiso de los supermercados y de los productos ofrecidos con la sostenibilidad, siendo este un factor clave a la hora de acudir a una gran superficie o a otra.

Para poder contar con nuevas prácticas respetuosas sostenibles, los supermercados pueden comenzar por determinados eslabones de su cadena, que pasan por contar con proveedores que también tengan en cuenta estas problemáticas. Por ejemplo, observamos cada vez más un aumento en la preferencia de vías de transporte más respetuosas con el medio ambiente, así como una mayor oferta de productos bio o ecológicos, que garanticen que su proceso de producción es sostenible.

En esta línea, este año trae como novedad la entrada en vigor del impuesto sobre envases de plástico no reutilizables, por lo que son muchos los supermercados que se sumarán a la propuesta del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, de conseguir que en el año 2030 todos los envases usados en los supermercados sean de material 100% reciclables y reciclados.