Carlos I, protagonista en la nueva era del brandy

Carlos I, el brandy de Jerez de Osborne, nos ha demostrado durante la pasada Madrid Cocktail Week 2022, semana mundial de la coctelería, que el brandy es un producto versátil por el que apuestan los mejores ‘bartenders’ nacionales e internacionales.

El brandy está asistiendo a una gran revolución en nuestro país, de la mano de las coctelerías, templos de la gastronomía líquida. Es un producto noble, que viene de la uva, y nuestro, de España. Alicia Marcos Martín, Brand Manager Premium Brandy en Grupo Osborne, explica que, en otros países, como, por ejemplo, Alemania, “el brandy es tendencia”. También entre los más jóvenes.

Atrás se quedan los prejuicios que la consideran una bebida pasada de moda, o que sólo sirve para cocinar. El brandy es un producto muy versátil, es “suave” y “aterciopelado”, lo que hace que encaje a la perfección en distintos tipos de cócteles o combinados de trago largo.

Lo comprobamos en la pasada Madrid Cocktail Week 2022, en Harrison 1933, uno de los locales de moda de la ciudad. El bartender invitado, el alemán Konstantin Hennrich, ligado a Stairs Bar, una de las coctelerías más importantes de Berlín vino a demostrarnos cómo el brandy viene pisando fuerte en su país de origen y nos hizo una selección de tres sorprendentes cócteles fuera de carta con el Brandy de Jerez Carlos I como protagonista. Great Harmonists, Grapescallion y Carlos & The Fizz.

Origen y legado

Allí quedó palpable que el brandy es un producto del que podemos estar orgullosos. Carlos I es un brandy de Jerez elaborado en El Puerto de Santa María, en las bodegas de Osborne, que acumulan más de 250 años de historia. Tiene un origen noble, la uva, y se elabora bajo el sistema tradicional de criaderas y solera, único en el mundo. Así se oxigena y se le da complejidad al producto, de la mano de su Master Blender. Por otro lado, se envejece en las famosas Sherry casks, botas de roble americano que contuvieron los más selectos vinos Amontillados y Olorosos de Osborne. Así, el brandy se cría con los matices y aromas que aportan estos preciados vinos.

Hennrich nos sorprendió con sus creaciones. A él le gusta la “base de la uva” y el “sabor agradable” del Carlos I para sus cócteles. Asegura que es una cuestión de “gastronomía”, en la misma inspiración que puede tener un chef. Pide que se confíe en los barman, en su recomendación, que es la de probar cócteles elaborados a base de brandy para entender por qué este producto está revolucionando ya la coctelería de otros países como Alemania.