Los restaurantes se reinventan para intentar superar el coronavirus

Si se cumplen las previsiones más pesimistas, la crisis provocada por el coronavirus, que aún sigue presente en nuestras vidas, va a llevar a muchos restauradores a bajar las persianas de sus locales. Para quienes quieren evitarlo, la consultora inmobiliaria Cbre, a través de su área dedicada a clientes de restauración, ofrece alternativas para generar beneficios y nuevas experiencias para el cliente con el propósito de “atravesar la crisis y crear un negocio más rentable”, algo que no va a suceder para quienes se empeñen en mantener su modelo de negocio tradicional.

Para afrontar la incertidumbre actual y futura, aquellos restauradores que quieran que su negocio siga a flote se van a ver obligados a diversificarse con acciones como, por ejemplo, priorizar el delivery para mantener un flujo de ingresos mínimos por si vuelven a venir mal dadas y hay que volver a confinarse. Chefs con estrellas Michelin como Dabiz Muñoz, del restaurante DiverXO, ya han creado su propio menú delivery. Los restaurantes virtuales de pedidos online sin presencia física en la calle también son una excelente alternativa en la era postcovid. Cualquier persona con una cocina comercial puede tener una cocina comercial en Ubers o Glovo y multiplicar los ingresos sin aumentar los gastos generales. Otra opción, son las “cocinas fantasmas”, sin espacio para clientes, pero capaces de acomodar a muchos operadores bajo un solo techo con el fin de bajar costes. También existe la alternativa de las franquicias virtuales, gracias a la cuales un restaurante puede comprar un concepto de menú completamente desarrollado, recetas, productos prefabricados -en algunos casos- y empaquetado para crear una versión regional de una marca más grande dentro del entorno virtual.

El pickup en la acera, es otra estrategia que, dicen en Cbre, se ha visto durante la crisis. Muchos restaurantes han ofrecido servicios de pickup para dos o más personas que recogen el pedido desde su coche a una hora fijada. Estos restaurantes ofrecen, asimismo, cenas individuales para familias o grupos, y dan la opción de hacer pedidos para dos o tres días diferentes y recogerlos al mismo tiempo. Además, explican en la consultora, “en un mundo posterior a la pandemia, la cena privada puede ser la opción ideal para familias o grupos que, aunque haya finalizado la cuarentena, no estén preparados todavía para acudir a un lugar lleno de gente”. En este sentido, añaden en Cbre, “es aconsejable considerar aumentar las ofertas de comidas privadas con divisores temporales en los comedores principales y concentrarse en un menú a la carta con opciones de estilo familiar. Un comedor privado podría ser una manera de volver a abrir un negocio aportando comodidad psicológica a los clientes”.

Por otra parte, el catering permite una gran cantidad de oportunidades en el momento actual y posterior a la pandemia. “Las cocinas de catering pueden producir menús a la carta para cocinas virtuales, almuerzos para las oficinas de regreso al trabajo, opciones de entrega de comidas completas, kits de comidas, etc. En definitiva, apostar por aquellos clientes cansados de la comida para llevar estándar, pero que aún no están listos para volver al a la normalidad subrayan desde Cbre. Finalmente, en la hostería postcovid pueden surgir grandes oportunidades para aquellos restaurantes que se asocien con cadenas de supermercados o minoristas de comestibles con el propósito de poner a la venta platos elaborados por cocineros en una zona aparte del local.