Francia prohíbe los trayectos cortos en avión que puedan hacerse en tren

Francia prohibió a finales de mayo los viajes en avión para los que exista una alternativa en tren por debajo de las dos horas y media, una medida con la que el país busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y luchar contra el cambio climático. El ministro de transportes, Clement Beaune, ha definido esta iniciativa como un “paso esencial y un fuerte símbolo en la política de reducción de emisiones” que en la práctica afectará a tres únicas rutas, las que conectan el aeropuerto de París-Orly con las ciudades de Nantes, Lyon y Burdeos. Avalada por la Unión Europea, la medida señala que para ser cancelada, la ruta aérea debe tener una alternativa ferroviaria de alta velocidad que permita viajar entre las dos ciudades en menos de dos horas y media. También debe haber suficientes trenes a primera y a última hora para permitir que los viajeros pasen al menos ocho horas en el destino.