Dinamarca abre el primer cementerio submarino de CO2

Con la paradoja de ser un antiguo yacimiento de petróleo que contribuyó a aumentar las emisiones, el Gobierno de Dinamarca ha inaugurado el primer espacio de almacenamiento de dióxido de carbono bajo el agua, a 1.800 de profundidad en el mar del Norte. Este cementerio, que va a estar gestionado y dirigido por la multinacional química británica Ineos y la energética alemana WintershallDea, permitirá almacenar hasta ocho millones de toneladas de CO2 por año hasta 2030. El proyecto, llamado Greensand, tiene la particularidad de que almacena un carbono no generado en sus proximidades, sino importado por mar de otros países como Bélgica y Alemania. Dinamarca ha sido el primer país que entierra CO2 ajeno y encuentra en el mar del Norte un lugar propicio por estar atravesado por multitud de oleoductos y depósitos geológicos agotados tras décadas de producción de petróleo y gas.