Una década de mejora del reciclaje en España
El modelo de gestión de varios sistemas colectivos de Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP) bajo una única entidad administradora ha permitido optimizar un 30% la gestión de pilas, baterías y residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) en España. Es la principal conclusión del balance que hemos realizado en Recyclia, coincidiendo con el décimo aniversario de nuestra apuesta pionera por esta estructura organizativa en nuestro país. Este modelo, adoptado posteriormente por distintos actores del sector, no sólo nos ha permitido reducir costes, sino también dotar de flexibilidad y capacidad de adaptación a los sistemas colectivos existentes o de nueva creación para absorber nuevas tipologías de residuos, según las necesidades y tendencias del mercado, así como generar sinergias en la gestión de RAEE, de pilas y baterías.
Entre otras fortalezas de las que nos ha dotado esta estructura encontramos, asimismo, una mayor capacidad de interlocución con las administraciones públicas, de compartición de conocimiento y de acceso a I+D. Estas se completan con la mejora de la formación de profesionales y una mayor capacidad de creación de empleo -labor esencial en un sector con un peso socioeconómico cada vez más relevante en la economía verde-, o el aprovechamiento de sinergias para, por ejemplo, la ejecución de campañas de sensibilización medioambiental.
Pero ¿cómo se traducen estos puntos fuertes en términos prácticos y tangibles? Concretamente en cifras como las siguientes: desde 2012, hemos gestionado más de 323.000 toneladas de RAEE y más de 45.000 toneladas de pilas y baterías, de las que un 58%, aproximadamente 26.400 toneladas, son domésticas. Ecopilas, la fundación administrada por Recyclia enfocada en la gestión de este último tipo de residuos, recoge diariamente 370.425 pilas domésticas, a través de los más de 46.000 puntos de recogida que hemos distribuido por toda España. Datos que sitúan a nuestro país en quinta posición en Europa por volumen de gestión de este tipo de residuos, según Eucobat, la patronal de sistemas colectivos de gestión de pilas.
La creación de una única entidad administradora nos ha permitido, a su vez, reducir notablemente el tiempo necesario para asumir la gestión de los flujos de residuos derivados de nuevos mercados, tales como el de paneles fotovoltaicos, baterías de vehículos de movilidad eléctrica o consumibles de impresión. Con el modelo de gestión de Recyclia como base, hemos creado operativas específicas de recogida y transporte para los nuevos flujos de residuos electrónicos y baterías contemplados por las normativas comunitaria y española desde 2012. Este es el caso de los paneles fotovoltaicos, cuyo reciclaje es responsabilidad de nuestra entidad desde 2013, habiendo gestionado 1.883 toneladas de estos residuos. También desde ese año, contamos con una operativa específica para las baterías de todo tipo de vehículos de movilidad eléctrica, es decir coches, motos, bicicletas y patinetes; un “nuevo residuo”, a pesar de cuya escasez (aún), ya hemos gestionado más de 67.000 kilos.
Por último, en 2018, creamos Tragatóner/Tragatinta, la primera iniciativa de nuestro país para cumplir con la obligación de reciclar cartuchos de impresión, considerados residuos electrónicos desde ese año. Desde entonces, hemos gestionado 974.000 kilos de cartuchos de tóner y tinta.
Durante la última década, desde Recyclia también hemos desarrollado una intensa labor para acercar la capacidad de reciclar a los ciudadanos. Así, en este periodo 2012-2022, hemos desplegado una media anual de 8.800 puntos de recogida para residuos electrónicos y pilas en toda España, disponiendo actualmente de una red de más de 88.200 puntos, las más extensas de nuestro país. Para ello, hemos suscrito en este periodo más de 2.500 convenios con entidades locales y administraciones autonómicas y más de 4.400 con la distribución comercial y otras organizaciones públicas o privadas.
Un referente y palanca de la recuperación
Una buena muestra del éxito que ha cosechado este modelo administrativo es el hecho de que más de 15 países, entre ellos Chile, Argentina, Ucrania o Montenegro, se hayan interesado por nuestra estrategia de gestión de residuos. Asimismo, estos datos reflejan el fortalecimiento de un sector de gran impacto en la economía verde y en la modernización de la actividad productiva en España, así como la robustez de un modelo de gestión que demuestra un alto valor para transitar hacia un esquema productivo circular y sostenible. Y es que la contribución a la modernización de nuestra economía del reciclaje de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos y de pilas y baterías no tiene techo por el momento, según constata nuestro II Informe Anual sobre las tendencias en esta industria.
En concreto, estamos ante una actividad que generó un Valor Añadido Bruto (VAB) de 1.100 millones de euros en nuestro país en 2019, lo que implica un crecimiento del 15,7% frente al año anterior, que fue de 955 millones. Además, la capacidad para generar puestos de trabajo en la denominada “economía verde” también creció en un porcentaje similar (15,8%) hasta los 19.000 empleos, y aportó 176 millones de euros a las arcas del Estado, en recaudación de impuestos.
En definitiva, los resultados del impacto de nuestra primera década de actividad demuestran que acertamos plenamente cuando adoptamos, de forma pionera, la figura jurídica de entidad administradora en el sector del reciclaje electrónico y de pilas de nuestro país. Además, ha sido la eficacia de este modelo la que nos ha permitido afrontar exitosamente los retos planteados por situaciones tan imprevistas y difíciles de predecir como la paralización de la actividad productiva provocada por el Covid-19. Ello unido al complejo escenario post pandemia y de tensión geopolítica en ascenso que afrontamos, exige reforzar la capacidad competitiva del sector de gestión de aparatos electrónicos. Fundamentalmente, por su potencial contrastado para ejercer como palanca de la recuperación socioeconómica y por tratarse del flujo que más rápido crece actualmente y que mayores perspectivas de crecimiento arroja en los próximos años.