Rocío Pastor, directora general de Sigfito: “Es fundamental que los alimentos se generen en un entorno medioambientalmente seguro”

La recogida y gestión de los envases se considera ya como un punto clave dentro de las estrategias de RSC de las empresas dedicadas a la producción de material agrícola. Rocío Pastor, directora general de Sigfito, explica los pasos que deben seguir los fabricantes para cumplir con la normativa que entrará en vigor en enero.

Una de las grandes novedades que incluye el futuro Real Decreto de Envases es que obligará a todas las empresas de insumos agrarios a asumir la responsabilidad de gestionar los envases comerciales e industriales, lo que se conoce como la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP), y que hasta ahora solo afectaba a los fabricantes de fitosanitarios. Aunque muchas compañías ya se han adelantado a la norma, otras tantas deben prepararse y formarse para conocer bien sus obligaciones. En este sentido, Sigfito se presenta como el único sistema de recogida de envases agrarios que certifica a los fabricantes el ahorro de emisiones de CO2 a través del reciclaje de sus envases. La entidad ya cumple con muchos requisitos de la ley y ha recogido un 61,6% de los envases puestos en el mercado, una cifra muy cercana al objetivo del 65% fijado para 2025.

Sigfito lleva más de 20 años encargándose de la correcta gestión de los envases agrarios. ¿Cómo ha evolucionado su actividad durante todo este tiempo?

A lo largo de estos 20 años Sigfito ha demostrado la viabilidad de un sistema que era necesario en el campo español.

Antes de aparecer nuestro sistema los envases acababan abandonados en el medio rural. Hoy día recogemos más de 5.000 toneladas en envases vacíos y los agricultores españoles tienen interiorizada la necesidad de reciclar en los puntos de recogida.

A través de Sigfito reciclan al año más de 157.000 agricultores en toda España.

¿Qué envases son susceptibles de ser recogidos por Sigfito y dónde se gestionan?

Todos los envases que han contenido productos fitosanitarios, fertilizantes, bioestimulantes, abonos o semillas. En definitiva, productos que se usan en la agricultura, independientemente del material del que estén fabricados. Todos los agricultores cuando han consumido estos productos, verifican que nuestro logotipo esté marcado en la etiqueta y después los llevan vacíos a los puntos de recogida, que son distribuidores de insumos y cooperativas agrarias.

Allí los envases son entregados al punto para su correcta gestión, seguidamente lo gestores contratados por Sigfito transportan los envases a las plantas autorizadas, donde el material plástico se recicla íntegramente y el papel cartón se valoriza energéticamente. Durante todo el proceso Sigfito sigue la trazabilidad del residuo hasta su gestión final.

Tenemos al servicio del agricultor cerca de 5.000 puntos de recogida repartidos por toda la geografía española. Independientemente del territorio, Sigfito, al estar autorizado en las 17 autonomías, da servicio en todas las Comunidades Autónomas para que el agricultor cumpla con la normativa, aunque en algunos territorios se generen pocos envases.

¿Qué ventajas aporta a las empresas agrarias formar parte un Sistema de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP)?

Las empresas que se adhieren a un Sistema de Responsabilidad Ampliada del Productor cumplen con la normativa, y se aseguran que los envases que se generan tras usar sus productos tengan una correcta gestión ambiental. Esta es la principal ventaja.

Con el nuevo Real Decreto de Envases que se publicará en breve, todos los envases comerciales e industriales deberán acogerse a un Sistema de Responsabilidad Ampliada del Productor del producto y cumplir una serie de requisitos.

En nuestro caso, las empresas que se adhieran a Sigfito cuentan con la experiencia de un sistema que lleva más de 20 años reciclando envases. Disponemos de un profundo conocimiento de la normativa para garantizar que las empresas cumplan con la normativa y ofrezcan un servicio ambiental a sus agricultores.

Y para el consumidor, ¿qué beneficios aporta esta labor de recuperación de envases?

El beneficio está claro, la mejora ambiental de la agricultura, permitiendo que el campo esté libre de envases. No hay que olvidar que los agricultores son los grandes responsables de producir alimentos y es fundamental que estos se generen en un entorno medioambientalmente seguro para la población.

Además, cuando el agricultor recicla nuestros envases recibe en el punto de recogida un justificante que le permite acreditar que ha cumplido con la normativa.

¿Qué cantidad de emisiones de CO2 se han logrado evitar gracias a la actividad llevada a cabo por el sistema de recogida?

Según nuestros cálculos, el 100% de los residuos valorizados han supuesto un ahorro de 6.744 toneladas de CO2.

Además, anualmente a todas las empresas adheridas a Sigfito le facilitamos un certificado anual con la cantidad de CO2 que han ahorrado ese año, gracias a la recogida de envases.

Es una manera de hacerles partícipes e informarles del proceso de reciclaje y sostenibilidad ambiental del que todas nuestras empresas son parte esencial.

El año que viene se aprobará el nuevo Real Decreto de envases. ¿Cuáles son las principales obligaciones que establece para los fabricantes de fitosanitarios, fertilizantes o bioestimulantes?

La norma en concreto se extiende a todos los fabricantes que usan envases industriales y comerciales, cuya gestión, a día de hoy, está fuera de una Responsabilidad Ampliada del Productor obligatoria.

Esto quiere decir que en el ámbito agrario el agricultor es el responsable de gestionar por su cuenta todos sus residuos de envases no recogidos por un sistema como Sigfito (fertilizantes, bioestimulantes, abonos o semillas, entre otros).

Con la aprobación del Real Decreto todos los fabricantes de producto envasado deben asumir la responsabilidad de la gestión, por lo que los agricultores entregarán al sistema los envases en vez de entregarlos directamente a un gestor y realizar trámites administrativos relacionados con ello.

Para el 2025, los fabricantes deberán alcanzar el 65% de los envases reciclados y valorizados. ¿Qué porcentaje gestiona actualmente Sigfito y cuáles son las previsiones de crecimiento?

Nuestro sistema recogió en 2021 un 61,6% de los envases comercializados, una cifra muy próxima al cumplimiento del objetivo.

Con la aprobación del Real Decreto, si un sistema no alcanza los objetivos de reciclado, la responsabilidad recaerá tanto en el SCRAP como en los fabricantes adheridos a él, con lo cual es de vital importancia llegar en 2025 al 65% y que todos los agentes involucrados en la recogida de envases se impliquen al máximo.

Con respecto a la previsión aún no podemos aventurarnos a sacar conclusiones. Ha sido marcado por la sequía, las altas temperaturas a nivel de clima y el incremento de los precios en general. Tendremos datos definitivos el primer trimestre de año que viene.

¿Cómo está afectando a los agricultores, fabricantes y otros actores del ámbito agrario la nueva Ley de Residuos y Suelos Contaminados aprobada este año?

Aquí ya no hablamos tanto de residuos de envases como de los residuos en general que se generan en el día a día de una explotación agraria.

El cumplimiento de la normativa en relación a la gestión de los residuos agrarios es algo complicado tanto para los fabricantes como los puntos de venta y los propios agricultores, los cuales tienen que realizar diversos trámites como, por ejemplo, solicitar comunicación previa a la Administración, cómo almacenar los residuos, qué etiquetado deben llevar, el archivo cronológico y memoria resumen, entre otros requisitos.

No obstante, para facilitar el cumplimiento de la normativa Sigfito imparte talleres formativos para que las empresas adheridas, los puntos de recogida y los agricultores sepan cómo deben cumplir con la ley de residuos.

El calentamiento global está impactando en el campo a nivel mundial. Sin embargo, los planes climáticos de la mayoría de los países no incluyen estrategias para actuar sobre los sistemas alimentarios. ¿Cómo ayudaría a la lucha climática la implantación de medidas de mitigación específicas para el sector agrícola?

Ya se está haciendo. La producción de alimentos desde hace muchos años se está llevando a cabo bajo patrones de sostenibilidad.

Una práctica fundamental, indicada en las medidas necesarias para la obtención de las ayudas de la PAC, es la rotación de cultivos para adaptarlos a la disponibilidad de agua, ajustar las épocas de siembra a las pautas de temperatura y precipitación y utilizar variedades de cultivos más adecuadas a las nuevas condiciones resistentes al calor y a la sequía.

Otras de las medidas adoptadas por la mayoría de los productores son cubrir de vegetación los suelos agrícolas, capaces de secuestrar dióxido de carbono.

La agricultura es responsable de más de un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero y también tiene un peso importante como sumidero de carbono. ¿Cuáles son los principales retos del sector para crear un sistema más productivo y al mismo tiempo reducir las emisiones y proteger el medio ambiente?

La agricultura se enfrenta a dos retos muy importantes que permitan un sistema más productivo y sostenible: el relevo generación y la incorporación de las nuevas tecnologías.

Más allá de los envases, el agricultor genera otro tipo de residuos relacionados con su actividad y, en muchos casos se desconoce cuáles son las vías para su correcta gestión. ¿Es necesario impulsar una normativa que facilite la gestión y fomente la economía circular en el ámbito agropecuario?

Si no es posible el cambio normativo, por lo menos que se pueda facilitar mediante el desarrollo de otras vías.

Por ejemplo, sería muy útil que fabricantes, productores y poseedores de residuos dispusieran de más formación y canales de comunicación. Que se organicen talleres de formación y módulos específicos para que cada integrante del sector sepa cómo debe cumplir con la normativa.

¿Qué importancia tiene la agricultura a la hora de fomentar la economía circular tratando los residuos para obtener recursos de ellos?

La agricultura ha sido ejemplo de economía circular antes de que existiera el propio término.

Los agricultores aprovechan todos los recursos que tienen a su alcance para rentabilizar al máximo la producción. Con los excedentes son capaces de generar energía.

En el caso de los envases en la agricultura todo el material plástico que se recicla es usado en la propia agricultura en forma de tuberías de riego.