Signus ha recuperado 150.000 toneladas de neumáticos

El material gestionado por la entidad en 2020 se ha convertido en materia prima para construir campos de fútbol o suelos acolchados de parques infantiles.

Las consecuencias de no someterlos a un tratamiento adecuado se cuentan por docenas, y todas son graves. Además de resultar altamente inflamables y poder, por tanto, ser germen de incendios, los neumáticos usados, si se acumulan en vertederos, se convierten potenciales en focos de infección. Su quema, la alternativa para hacerlos desaparecer hasta hace no tanto tiempo, genera gases perjudiciales para el medio ambiente y la salud. Y un neumático abandonado puede tardar en degradarse más de un milenio. Por eso, la labor que desempeña el Sistema Colectivo de Gestión de Neumáticos Usados (Signus) se revela, primero, como fundamental y, segundo, como inspiradora porque, más allá, sirve también como motor de la economía circular.

Durante 2020, el año de la pandemia, Signus transformó más de 150.000 toneladas de neumáticos en nuevos materiales. En concreto, de las más de 170.000 toneladas de neumáticos gestionadas, han sido 150.228 las convertidas en nuevos productos útiles para diferentes aplicaciones. Del total recopilado, cerca del 12% se destinó a su reutilización, para reconvertirlos en neumáticos de segundo uso o recauchutados; el 35,2% se dedicó a la valorización energética, y el restante 52,8% fue directamente reciclado en plantas de transformación.

Andalucía es la Comunidad en la que Signus ha recuperado más neumáticos fuera de uso: un total de 32.448 toneladas. Le sigue Cataluña, con casi 24.000, y la Comunidad de Madrid, con 16.630. También Castilla y León y Galicia han registrado una cifra superior a las 15.000 toneladas gestionadas.

Como elementos para la construcción, para carreteras, para campos de fútbol o para suelos acolchados de parques infantiles. Son algunas de las aplicaciones que el Sistema Colectivo de Gestión de Neumáticos Usados ha procurado a las más de 150.000 toneladas de neumáticos fuera de uso que ha gestionado a lo largo del pasado año. En detalle, destacan las 21.660 toneladas para la instalación de más de 200 campos de fútbol, las 14.637 toneladas para parques y zonas de recreo infantil y las 2.202 toneladas incorporadas a más de 200 kilómetros de carreteras.

También para crear moda

Acercándose a su primer aniversario, el proyecto Neomatique continúa dando satisfacciones a sus creadores. Signus Ecovalor, en colaboración con SlowFashionWeek, alumbró hace algunos meses una nueva alternativa innovadora para los neumáticos desechados, convirtiéndolos en elementos para el diseño de moda y complementos.

Pendientes, brazaletes y, también, bolsos de mano, fabricados artesanalmente y tomando como materia prima principal los neumáticos en un ejercicio que, además, facilita nuevas posibilidades a los diseñadores, minimiza su gasto en otros materiales y, también, fomenta la economía circular mediante un uso más llamativo y estético de lo que no deja de ser, al final, un residuo.

Destaca Signus en su informe de 2020 que la pandemia mundial y la consecuente crisis económica ha precipitado la concienciación global, logrando que Europa coloque la sostenibilidad, junto a la digitalización y la reindustrialización “como uno de los principales pilares de la recuperación”.

Subraya además la asociación que el III Plan Empresarial de Prevención de neumáticos fuera de uso 2018-2021 continuó, durante 2020, registrando la implantación de medidas por parte de sus empresas adheridas. Así, el pasado año se contabilizaron 770 acciones de las empresas para difundir las buenas prácticas de mantenimiento del neumático, 1.236 medidas para fomentar las buenas prácticas de conducción y 691 programas para compartir fórmulas que garanticen la correcta gestión del neumático fuera de uso.

Asimismo, Signus ha impulsado diferentes proyectos de I+D para dar valor a los materiales reciclados colaborando con empresas privadas, administraciones públicas, universidades y centros tecnológicos. Han sido estudios para, entre otras, las aplicaciones del polvo de caucho procedente de neumáticos fuera de uso. También se ha alcanzado en determinadas gamas de neumáticos la reducción del impacto acústico entre 1 y 7 decibelios.