El CSIC crea las primeras mascarillas biodegradables del mundo

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la empresa Bioinicia están trabajando en el desarrollo de la primera mascarilla biodegradable del mundo. Será una mascarilla similar a la que desde hace un tiempo comercializa el CSIC que cuenta con 16 horas de vida útil, una protección diez veces mayor que el resto de tapabocas y una filtración de aerosoles del 99%, si bien este modelo sería más respetuoso con el medio ambiente.

La versión mejorada y biodegradable de esta mascarilla está confeccionada por materias primas naturales, plásticos de origen microbiano, un filtro compostable y sujeciones elaboradas con materiales derivados del maíz. Sus componentes son totalmente biodegradables y podrían transformarse en agua y CO2 con el tiempo, lo que evitaría que millones de toneladas de plásticos terminasen contaminando los océanos.