Coca-Cola elige España para probar sus tapones adheridos a la botella
Es la primera prueba de mercado que la compañía realiza en Europa antes de introducir el nuevo cierre en otros países y forma parte de la aplicación de la nueva Directiva europea sobre plásticos de un solo uso, cuyo objetivo es garantizar que se recojan más botellas de plástico junto a sus tapones
Cada minuto se compran un millón de botellas de plástico en todo el mundo. La mayoría de ellas se usa una sola vez y tiene un promedio de vida útil de entre 12 y 15 minutos, pero puede tardar entre 400 y 1000 años en desintegrarse. Además, muchos de estos residuos acaban cada año en los océanos, amenazando el buen funcionamiento del ecosistema marino. Reducir la cantidad de plásticos de un solo uso se ha convertido en una necesidad cada vez más acuciante para el planeta y con el objetivo de impulsar esta labor, la Unión Europea ha diseñado una estrategia para los plásticos de un solo uso que pretende reducir la cantidad de residuos de este tipo que se acumulan en el medio ambiente.
Además de prohibir ciertos productos desechables, como los bastoncillos de algodón o las pajitas de plástico, la normativa comunitaria establece que las tapas y los tapones de plástico de las botellas solo podrán ponerse en el mercado si permanecen unidos al recipiente durante su consumo, asegurando así que el tapón se recicla junto a la botella. La conversión deberá llevarse a cabo antes de julio de 2024 y se ha convertido en todo un desafío técnico para la industria de la alimentación y las bebidas al que Coca-Cola, que desde hace años apuesta por la sostenibilidad como eje central de su modelo de negocio, ya está dando respuesta a través de su estrategia Un Mundo sin Residuos.
A partir del próximo mes de mayo, y durante 11 semanas, la compañía producirá y probará en España los nuevos tapones que ha desarrollado en al menos cuatro millones de botellas de plástico de medio litro de Coca-Cola, Fanta, Sprite y Schuss. Los nuevos cierres se fabricarán en Barcelona y se comercializarán este verano en puntos de venta seleccionados de Cataluña, Baleares, Aragón, Canarias y del centro y sur de España.
La transición al nuevo tapón adherido a la botella se comunicará de forma clara a los consumidores a través de un mensaje impreso en el envase: Nuevo tapón, por favor recíclame, así como en el marketing online y en las tiendas. Según la compañía, el diseño ha sido sometido a exhaustivas pruebas entre los consumidores, y el tapón resultante que se va a probar en España es “la opción preferida en términos de diseño, comodidad y experiencia del consumidor”.
Esta experiencia piloto servirá para evaluar la adaptación de los tapones a las líneas de producción y su rendimiento en condiciones de temperatura variable antes de realizar un despliegue más amplio en el resto del país y en toda Europa. Junto con las opiniones que se recabarán de los consumidores, esta prueba aportará información valiosa que Coca-Cola aplicará cuando introduzca los nuevos tapones a gran escala.
La compañía prevé adoptar un enfoque por etapas hasta completar la transición de sus envases, en estrecha colaboración con sus embotelladores Coca-Cola European Partners y Coca-Cola Hellenic Bottling Company (CCHBC). Así, a los despliegues iniciales les seguirán las conversiones mercado a mercado, a fin de cumplir con la fecha tope de 2024.
Impulso a la recogida y el reciclaje
La directiva europea sobre plásticos de un solo uso está alineada con Un Mundo Sin Residuos, la estrategia global de Coca-Cola en materia de envases, en la que, además de comprometerse a recoger y reciclar el equivalente al 100% de los envases que comercialice en Europa Occidental para 2025, busca reducir el uso de materia prima virgen en su fabricación, que sean 100% reciclables e invertir fuertemente en ecoinnovación para hacerlos cada vez más sostenibles.
“Compartimos el compromiso de la UE de mejorar la recogida y el reciclaje de los residuos de envases. Nuestro objetivo es recoger una botella o lata por cada una que vendemos, garantizando que todos nuestros envases se reciclen y que ninguno acabe como residuo en nuestros océanos o en el medio ambiente. En 2018, en España se introdujo el mensaje Por favor, recíclame en los tapones de nuestros envases de Coca-Cola y estamos encantados de ser los primeros en Europa en estrenar esta nueva solución que unirá los tapones a las botellas”, señala Juan Ignacio de Elizalde, director general de Coca-Cola Iberia.
Dentro de esta estrategia se enmarca el proyecto Mares Circulares, que tiene como objetivo limpiar costas, entornos acuáticos y fondos marinos de nuestro país y Portugal, generar conciencia sobre el reciclaje y promover la economía circular. Desde que se pusiera en marcha en 2018, se han recogido más de 1,2 toneladas de residuos de las costas y los fondos marinos de España y Portugal. Además, el año pasado, Coca-Cola en España incorporó la tecnología CanCollar, que le ha permitido reemplazar las anillas de plástico de sus multipacks de latas por agrupadores de cartón totalmente reciclable, contribuyendo así a reducir la basura plástica.