Medidas para realizar un uso más responsable de productos fitosanitarios

A la hora de garantizar la protección efectiva de los cultivos, también será esencial una utilización efectiva y racional de las soluciones de sanidad vegetal.

Si bien la aplicación de tratamientos fitosanitarios y otras soluciones de sanidad vegetal pasa por ser un factor clave para hacer frente a la presencia y proliferación de aquellas plagas y enfermedades que amenazan tu cosecha, este proceso deberá llevarse a cabo tomando en consideración algunos aspectos clave y que debes tener presentes en todo momento.

Así, más allá de otros aspectos relacionados de forma directa con la amenaza específica a la que te estás enfrentando y el sistema de aplicación elegido, desde AEPLA te recomendamos que pongas en práctica las siguientes buenas prácticas a la hora de garantizar un uso responsable de los productos fitosanitarios.

En primer lugar, será preciso detectar qué amenaza concreta está afectando a tu cultivo y, con el asesoramiento experto de una persona con la capacitación necesaria en este sentido, seleccionar el producto o tratamiento que mejor respuesta puede ofrecer para la mitigación o subsanación total del problema.

Del mismo modo, también será esencial que sigas escrupulosamente las indicaciones reflejadas por el fabricante en cuanto a sistema de aplicación, dosis recomendable y, sobre todo, precauciones de uso.

Una vez realizado el paso previo anterior, será el momento de establecer una planificación meditada sobre aquellos aspectos que contribuirán a que el tratamiento a realizar ofrezca la mayor efectividad posible, en términos de eficacia y eficiencia.

Para ello, un factor de gran importancia, al que en ocasiones no se le otorga el valor que merece, es la determinación del momento en el que se llevará a cabo la aplicación sobre el cultivo.

En este punto, te recomendamos que prestes una especial atención a las siguientes recomendaciones básicas. Así consulta el nivel de efectividad del tratamiento elegido en base a la época del año en el que se realizará la aplicación, por si existiese algún factor limitante.

Analiza el nivel de saturación del suelo a causa de precipitaciones o prácticas de riego, ya que no es conveniente proceder a la realización de aplicaciones en suelos saturados.

Salvo en casos de extrema urgencia, evita la aplicación de tratamientos fitosanitarios en el caso de que exista una alta probabilidad de precipitaciones durante un margen de dos o tres días.

Para finalizar, recuerda siempre tomar medidas para asegurar al máximo la protección de tu parcela y su entorno en términos de sostenibilidad, ya que tan poco recomendable es descuidar la sanidad vegetal como optar por matar moscas a cañonazos.

En base a esta reflexión, te recomendamos que extremes tu prevención en relación a los siguientes aspectos. Así delimita las zonas que presentan un carácter más vulnerable y concentra toda tu atención en garantizar su protección; señaliza convenientemente la zona en la que tienes previsto realizar la aplicación y analiza con detenimiento la posible presencia de especies animales, retrasando el proceso si fuese necesario. Por último, respeta escrupulosamente las indicaciones del asesor y del fabricante, en cuanto a número de aplicaciones y dosis o concentración del producto.