El retraso de las ayudas hunde la venta de tractores

Los fabricantes piden a las Comunidades que concreten las solicitudes a la maquinaria agrícola que han aprobado para avivar un mercado que registra números negativos.

Ansemat indica que los datos de matriculaciones de vehículos agrícolas en febrero de 2023 muestran “una caída inusual” que, a su juicio se debe a que aún no se ha especificado quienes serán los receptores de las ayudas convocadas en mayo de 2022 por las comunidades autónomas.

Estas ayudas estaban dotadas con un total de 26,5 millones de euros para la promoción de tecnologías de agricultura de precisión en la maquinaria agrícola, con ayudas directas al 40% de la inversión.

La convocatoria tuvo tal éxito que, a 13 de octubre de 2022, el total de solicitudes recibidas hasta ese momento suponían cerca de 136 millones de euros, haciendo necesaria la utilización de fondos de otras líneas con superávit, e incluso hacer uso del presupuesto de convocatorias posteriores (las previstas para 2023 y 2024).

La asociación denuncia que por el momento se desconoce el número de solicitudes aprobadas por las comunidades autónomas y a qué tipos de máquinas se vinculan y que, por lo tanto, mientras esta situación se prolongue el registro de compra de maquinaria va a seguir disminuyendo en los próximos meses.

El secretario general de Ansemat, Ignacio Ruiz, explica que un agricultor no va a comprar una maquinaría nueva sin saber si le van a conceder la ayuda y, al mismo tiempo, dado que la fabricación de las máquinas está vinculada a las solicitudes de compra, si estas no llegan el mercado se paraliza.

Las matriculaciones de vehículos agrícolas publicados por la Dirección General de Tráfico muestran una caída acumulada en enero y febrero de este año del 6,5% respecto al mismo periodo de 2022, pero esta cifra es aún peor si se compara con la media del periodo 2020 a 2022, ya que supone un retroceso del 13,4%. Prácticamente todos los tipos de vehículos agrícolas muestra tendencias negativas en febrero pasado, pero sobre todo destaca la reducción del 27% del número de tractores matriculados.

Para Ansemat, si bien este comportamiento negativo del mercado está causado por las variables que afectan a la demanda como el aumento de costes intermedios y el mayor tiempo de espera en la entrega de los vehículos, en esta ocasión la implementación del plan de ayudas está también influyendo.

“Si tenemos en cuenta que desde el momento en el que se decide hacer una inversión hasta que se refleja en los datos del registro o matriculaciones de maquinaria, pasan varios meses -siempre que la máquina no esté en stock-, los datos actuales de matriculaciones reflejan la paralización del mercado provocada por la implementación de ayudas en 2022”, afirma la asociación.

La asociación denuncia que “tanta incertidumbre y falta de información supone un problema añadido para los fabricantes que es necesario solucionar a la mayor brevedad posible. El efecto será positivo para los agricultores y ganaderos que hayan decidido invertir en nuevas tecnologías”.

El 23 de marzo, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación se va a reunir con las comunidades autónomas para abordar este asunto, han anunciado desde la asociación.