Se busca pastor

La creación de una bolsa de pastores y medidas de apoyo al relevo generacional son algunos de los objetivos que se marca la cooperativa Oviaragón, que cierra en positivo un año especialmente complicado para el sector.

No corren buenos tiempos para el sector ovino, pero Oviaragón, cooperativa matriz del grupo aragonés Pastores, ha cerrado el año 2021 con un aumento del 3,8% de su cifra de negocios, superando los 48,7 millones de euros frente a los 46,9 millones de 2020.

El resultado consolidado positivo ascendió a 6.237 euros. “Ha sido un año complicado para el ovino”, afirma Ángel Tarancón, director general de Oviaragón-Grupo Pastores, quien añade que a los problemas que ya venía arrastrando el sector, el descenso de la cabaña -en los últimos años ha caído cerca del 4,5%- y el cierre de las explotaciones (162 de socios), se han añadido la subida de las materias primas y costes energéticos, el menor gasto por parte de los consumidores, las huelgas, y la incertidumbre derivada por la situación de la crisis sanitaria.

“Estamos en mercados buenos y hemos conseguido superar el año y cerrar en positivo. No hemos tenido problemas de comercialización y hemos solventado los problemas de recoger los corderos. Hemos salvado los muebles en la situación que hay”, aunque reconoce que “la cifra de negocios ha subido por el aumento del precio del cordero, que no ha aumentado nada en comparación con el resto de la alimentación” ni en relación a los costes, pero “somos optimistas”.

La cooperativa se ha marcado el objetivo de mantener la actividad en 2022 y aumentar las rutas de distribución. En la actualidad, está presente en las comunidades de Aragón, Cataluña y País Vasco, así como en 15 países. Oviaragón-Grupo Pastores también impulsará otras líneas de actividad como la gama de quesos. La sociedad cooperativa puso en marcha en 2021 en la localidad turolense de Perales del Alfambra una granja de ovino de leche con 1.200 ovejas para elaborar quesos bajo la marca Granja Perales, lanzándose en primer lugar el fresco, que ya se vende en más de 150 carnicerías y en grandes superficies (Alcampo, Carrefour o Eroski, entre otras). Ahora, acaban de lanzar el queso curado -recientemente premiado con la medalla de plata en el Concurso Mundial de Quesos (World Cheese Awards)- con el que prevén dar el salto internacional. De momento, se está introduciendo en carnicerías y también en grandes superficies. “Es un producto nuevo. Estamos contentos”.

Salvar producción y explotaciones

Pero, sin duda, uno de los principales objetivos de la sociedad cooperativa -que invirtió 4,5 millones en los dos años de pandemia para ampliar las instalaciones en Mercazaragoza y la sala de despiece, así como en la línea de queso curado-, es evitar el descenso de las explotaciones. “Vamos a lanzar varios servicios como la bolsa de pastores”, afirma Ángel Tarancón. La cooperativa será la encargada de gestionar esta bolsa, que permitirá cubrir las bajas de los pastores o las vacaciones, así como ayudarles en momentos de más trabajo e, incluso, tener pastores compartidos entre varios ganaderos de una zona.

Otro de los programas en los que se está trabajando está relacionado con el relevo generacional para que no se cierren explotaciones y se incorporen jóvenes. “En muchos casos, el pastor que tienen se quiere quedar con el negocio, pero no dispone de capacidad económica para afrontar la compra. Se trabaja con ellos para intentar dar continuidad a la explotación”. De momento, hay un plan piloto de este servicio de acompañamiento y apoyo al relevo generacional que se está probando en cuatro ganaderías de socios.

La viabilidad de las granjas no solo queda comprometida por la falta de relevo generacional. “La rentabilidad en el sector del ovino está muy ajustada y se necesita una dedicación importante”, incide Ángel Tarancón, quien matiza que “esto no quiere decir que no sea rentable”. Tan solo los precios de alimentación en cebo de corderos han crecido el 85,2% desde el verano 2020, mientras que el precio de los corderos empezó a subir en Navidad y se ha sostenido algo más alto -“no sabemos si se mantendrá”- por la escasez al verse los partos de las ovejas afectados por la climatología y las nevadas.

Exportación

De media, se calcula un aumento de 12 euros por cordero el año pasado en relación al ejercicio anterior. Mejor evolución se ha registrado en exportación, ya que los precios en las ventas con ocasión de la celebración del Ramadán se han mantenido y se está recuperando la comercialización del cordero Agnei Ibérico, que se destina a la hostelería de alta calidad y cuyas ventas se vieron afectadas por las restricciones que se sufrieron durante la pandemia por el Covid-19.

La cooperativa, aparte de trabajar en mantener los resultados positivos y que repercutan en los socios, también centrará su actividad en intentar frenar el descenso del ovino, aunque “sin la ayuda” de la Política Agraria Comunitaria (PAC), se ve un objetivo complicado.

“En la nueva PAC nos venden el tema verde y el apoyo a la ganadería extensiva, pero no beneficia al ovino, se mantienen los vicios y las ayudas a los derechos históricos...” en lugar de al ganado que pasta la tierra. “Ha habido una decepción en el sector. Es cuestión de repartirlo mejor y adaptarse a la realidad”, señala Ángel Tarancón. A pesar de ello, mantienen la esperanza porque “están las grandes líneas, pero los detalles es lo que puede dar más o menos acceso. Ahí puede haber margen”.