Begoña García Bernal, consejera de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio de Extremadura: “Extremadura sale beneficiada con la nueva PAC”

La consejera de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio, Begoña García Bernal, repasa la situación del sector. La subida de los precios y los insumos, la sequía y la guerra de Ucrania están afectado a un sector clave en Extremadura, que aporta al PIB más de un 8%, siendo el sector agroalimentario su principal empresa.

A Begoña García Bernal (Cáceres, 1970) no le asustan los retos. Con solo un 25% de visión, asumió en 2015 la responsabilidad de dirigir la Consejería de Agricultura de Extremadura, un cargo en el que Guillermo Fernández Vara la revalidó en 2019. Licenciada en Derecho y con una amplia trayectoria en la defensa de la mujer, defiende la discriminación positiva y la perspectiva de género de la nueva PAC para impulsar el empoderamiento femenino en un sector tan masculinizado como es el agrario.

¿Cómo está afectando la guerra de Ucrania y los altos precios de la energía y las materias primas al sector agroalimentario?

Extremadura ha aumentado sus exportaciones un 29% y gran parte son productos agroalimentarios, el 43% del total, por lo que la Guerra ha incidido en estos sectores estratégicos para la región. Además, el aumento de los costes de producción, los insumos, los fertilizantes, la energía, más los problemas endógenos del campo inciden negativamente. Extremadura es importadora de cereal, maíz y girasol por lo que el aumento de precios afecta a la balanza comercial. Por ello, desde el punto de vista de la agricultura, apoyamos la flexibilización para la importación de materias primas de terceros países, siempre y cuando esté avalado por la Comunidad Económica Europea. El sector primario tiene serios problemas con los costes de producción y los precios finales casi nunca cubren este aumento de precios por lo que repercutirá en el cliente final.

¿Qué valoración hace del Plan Estratégico de la PAC? ¿Su Comunidad se verá beneficiada?

El 5 de mayo tuvo lugar la reunión bilateral con el Ministerio para que responda a la carta europea, por lo que esperaremos a la publicación final para la valoración, eso será sobre el mes de julio. De la PAC a Extremadura le beneficia que incluya a los regadíos de las Vegas Altas y Bajas y que entre el sector del tabaco de la Vera, pero hay que esperar para valorar y saber cómo quedamos. No se han presentado alegaciones, han sido unas aclaraciones técnicas.

Vamos a tener una PAC más verde. ¿Qué le parece este peso tan medioambiental en la PAC?

La agricultura y ganadería están preparados y saldrán ganando con la PAC y es lo que importa.

Con la guerra de Ucrania hay sectores que piden flexibilizar calendarios y objetivos para no perder potencial productivo y por tanto soberanía alimentaria. ¿Usted es también partidaria?

La flexibilización es fundamental para todo el país y poder elaborar pienso para nuestros sectores, protegiendo la ganadería extensiva y las dehesas.

Uno de los problemas del campo es la falta del relevo generacional ¿Qué medidas estás aplicando para incorporar jóvenes y mujeres?

En Extremadura la situación es diferente, es la región que más dinero aporta a la incorporación de jóvenes al campo, con 75 millones de euros adjudicados en la última convocatoria, en la que han presentado solicitud unos 900 jóvenes, y de ellos el 32% son mujeres. La incorporación de los jóvenes y de las mujeres en Extremadura es importante, pero nunca suficiente. Tenemos 91 titularidades compartidas, frente a las 0 que había cuando llegamos al gobierno. Sobre los incentivos industriales en la última convocatoria se han presentado 248 solicitudes con una inversión superior a los 295 millones de euros financiados con la línea Next Generation. Y además han sido 25 millones de euros en las últimas 4 convocatorias. Estos incentivos son muy importantes porque se han invertido aproximadamente 380 millones de euros y de ello el 25% de la subvención es a fondo perdido. A estos incentivos acuden empresas muy importantes como Ubalsa en La Albuera (Badajoz) o Monliz en Badajoz. Estas compañías son muy importantes porque son transformadores de la materia prima, con lo que el valor añadido se queda en la región.

¿Qué importancia tiene el cooperativismo?

Fundamental, aglutina a productores y es el nexo de unión con la administración. En los últimos años han jugado un papel fundamental en la comercialización y exportación. Hay cooperativas tan importantes como Viñaoliva, Acopaex o Valle del Jerte. Su papel en los últimos años ha servido para generar empleo y fijar la población al territorio, siendo un motor de desarrollo en las zonas rurales.

Es la primera mujer que ocupa el puesto de consejera de Agricultura en Extremadura ¿ha sido difícil?

Ha sido y es difícil, soy mujer y discapacitada en un mundo muy difícil, muy masculinizado, pero las mujeres estamos entrando con fuerza y ganas. Nos hemos empoderado y las políticas públicas son fundamentales para favorecer a la mujer en este sector, como la nueva PAC que incluye la discriminación positiva e incorpora la perspectiva de género.

¿Cómo ha evolucionado el sector agroalimentario y la generación de valor añadido?

En este punto yo creo que tenemos que resaltar el Plan Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) agroalimentario, que sin duda, permitirá el fortalecimiento de la industria agroalimentaria extremeña, la digitalización de toda la cadena de valor y el impulso a la innovación, desarrollo e investigación ligada a la producción extremeña. Este proyecto estratégico transformará el sector y es y será esencial para nuestro campo porque apoya a la agricultura, a la ganadería familiar, a las pymes, en definitiva, a un sector que es pieza clave en la recuperación y en el desarrollo de esta región y de este país. Todo esto supone una inyección al sector de más de 1.800 millones de euros de inversión pública, pero, sobre todo, representan el compromiso político del Gobierno de España. Extremadura tiene aquí una oportunidad de oro para seguir creciendo, nuestro sector agroalimentario tiene que revitalizarse, renovarse, es decir, emprender un viaje hacia un futuro mucho mejor. Extremadura es un abanico de posibilidades, y trabajando juntas y juntos seremos una región más sostenible, más moderna y eficiente, y sobre todo más inclusiva.

Recientemente se han celebrado elecciones en el campo ¿Cómo lo valora?

Las elecciones al campo transcurrieron con total tranquilidad. Al final no existe un mayor proceso democrático que éste, y por eso, nuestra única función era facilitar el proceso, para que los y las profesionales del sector votaran y eligieran a sus representantes. A partir de ahora, cuando el Consejo Asesor Agrario esté formado, nos toca continuar trabajando como hasta ahora, por nuestra región, para solventar los retos a los que nos estamos enfrentando en unos momentos bastantes complicados e inciertos, debido, en gran parte, al encarecimiento de los insumos como consecuencia de esta injusticia e injustificada guerra, pero también por la sequía que ha azotado a nuestra región.

¿Cuál es la situación de las razas ganaderas autóctonas?

España cuenta con 189 razas, y eso no es más que el reflejo de la inmensa fuente de generación de riqueza ganadera con la que contamos. Por eso, es fundamental continuar trabajando para mantener la rica biodiversidad genética que tenemos en nuestra región, porque además, de esta manera, estaremos poniendo nuestro granito de arena para garantizar el desarrollo sostenible de la ganadería, el cual, además, juega un papel social y medioambiental crucial, porque conserva el paisaje y fija población en el medio rural, dos de los retos más importantes en estos momentos. La Consejería de Agricultura tiene un compromiso con nuestro campo, con los y las profesionales del sector, y no dejaremos de trabajar para evitar, entre otras cosas, que las razas autóctonas sean abandonadas y se extingan.