Asaja empodera a las mujeres

La organización agraria es pionera en crear un sectorial específica que nace con el objetivo de acercar a las mujeres del ámbito rural formación e información, así como coberturas sociales, para favorecer la igualdad de oportunidades entre este colectivo esencial de la sociedad. La preside Blanca Corroto.

Asaja Mujeres ya es una realidad. La mayor organización profesional agraria de España ha querido colocarse a la vanguardia y acaba de crear este nuevo colectivo que tratará de “llevar la voz y las reivindicaciones de las mujeres rurales a las organizaciones, foros e instituciones oportunas”, y buscará impulsar acciones y servicios que ayuden a germinar lo que debe de ser la definitiva igualdad de oportunidades para ese colectivo tan importante en nuestra sociedad como, a menudo, invisible.

El gran escaparate internacional de la maquinaria agrícola FIMA, celebrado en Zaragoza a finales de abril, sirvió para la puesta de largo de la nueva Asaja Mujeres y para la presentación oficial de quienes han empujado la constitución de esta asociación, a cuyo timón se encuentra ya Blanca Corroto, una toledana que no sólo atesora una gran experiencia en el mundo ganadero y agrícola -a los que está vinculada por tradición familiar desde la cuna y laboralmente desde hace más de dos décadas-, sino que también cuenta con un importante bagaje en la asunción de responsabilidades organizativas. De hecho, ella se convirtió en la primera mujer en presidir una organización profesional agraria en Castilla-La Mancha, Asaja Toledo, hace 11 años, cargo que actualmente compagina con los de Tesorera en Asaja nacional y en la cooperativa toledana de la que forma parte, y con su propia explotación de cereal y olivar en la localidad de Navahermosa.

Ejemplo, pues, de mujer rural, agro, formada -estudió Derecho- y pionera, a sus 49 años Corroto no duda en dar un nuevo paso al frente para echar a rodar este nuevo colectivo al que define como “una sectorial de Asaja nacional”; una “hija” de la organización general que, a su entender, era necesaria porque, aun cuando la OPA siempre representa y defiende los intereses de sus agricultoras y ganaderas asociadas, “hay foros y colectivos exclusivamente dedicados a las mujeres en los que Asaja no podía estar como tal”, mientras que con este brazo femenino, sus representantes sí tendrán acceso a esos espacios. De sus palabras se desprende que afronta este reto con el arrojo que la caracteriza, con ganas y entusiasmo; no en vano, denota que cree firmemente en que, no sólo es posible, sino que debe “dignificarse el papel de la mujer rural”.

Con ese objetivo en el punto de mira, Asaja Mujeres va a trabajar en dos líneas principales. Por un lado, acercará cursos de formación e información al entorno rural para trabajar la preparación y la confianza de sus mujeres; por otro, organizará actividades de diversa índole directamente enfocadas a motivarlas al autoempleo en la agricultura y la ganadería y a asumir responsabilidades fuera del hogar, tanto en esas explotaciones propias, como en posibles organizaciones y entidades que las representen o de las que formen parte. En este sentido, se promoverán jornadas y encuentros con mujeres que han alcanzado el éxito y se han convertido en referentes en distintos ámbitos -“presidentas de cooperativas, grandes deportistas, directivas, etc.”-, para, “de la mano, también, de psicólogas especializadas, hacer mucha pedagogía y que las mujeres rurales arrinconen el qué dirán y se mentalicen de que es posible”.

Superar la barrera de la conciliación

Para que arraigue entre ellas esa confianza, Blanca Corroto considera clave superar también lo que aún hoy constituye una gran barrera: “Aunque se ha avanzado, sigue habiendo machismo en muchos ámbitos y la realidad es que es la mujer quien habitualmente carga con el hogar y el cuidado de los hijos y de los ancianos”. Por ello, en la hoja de ruta con la que nace Asaja Mujeres, también aparece subrayado el objetivo de “hacer de la conciliación familiar una realidad”. Así, asegura la presidenta del colectivo que llamarán a las puertas de las consejerías y departamentos de bienestar social de las diferentes comunidades autónomas para “intentar presentar buenos proyectos para todas las zonas rurales donde haya carencias de centros de día para la atención de mayores y de personas con discapacidad y donde falten residencias o guarderías”. “Hay que promover centros comarcales para liberar a las mujeres” de esas cargas familiares que a menudo asumen en exclusividad, para que, con ello, “puedan, cuando menos, plantearse la incorporación al mundo laboral”.

Las videollamadas, que tanto protagonismo han adquirido en los últimos dos años con la pandemia sanitaria, serán claves para que Asaja Mujeres pueda cumplir con una agenda que, apenas estrenada, aparece, pues, repleta de proyectos, ideas e ilusión. Y es que, aunque por supuesto, habrá reuniones puntuales en la sede de Asaja nacional en la capital madrileña, los medios telemáticos van a ser un gran aliado para su operatividad teniendo en cuenta que en el comité promotor de la nueva asociación hay representantes de puntos geográficos tan dispares como Galicia, Granada o Cáceres.

Equipo multidisciplinar y multigeográfico

En concreto, acompañan a Blanca Corroto González, como vicepresidenta primera, Ana Pastor Soria, agricultora de Soria; como vicepresidenta segunda, Montse Román Nevado, ganadera de bovino y porcino de Cáceres; como vicepresidenta tercera, Susana Félix Cabello, cerealista de Calamocha (Teruel); como secretaria, Eva Marín de la Fuente, agricultora de viñedo, olivar y cereal de Toledo y, a su vez, presidenta de la sectorial Asaja Joven; como tesorera, Ana Leonor Abad Rubio, apicultora de Ciudad Real, y con cargo de vocales, Begoña Liberal Beasaín, Lorena Madriñán Fernández y Lucía Molinos Molinos, agricultoras de Navarra, Galicia y Granada, respectivamente.

“Hemos hecho una pequeña selección para arrancar, pero se sumarán muchas más, de distintas actividades y provincias”, afirma Blanca Corroto no sin dejar de subrayar que trabajarán también codo con codo con Asaja nacional para defender intereses y atajar problemas que no dejan de ser comunes, a todas y todos los agricultores, a todas y todos los ganaderos de España, siendo el más acuciante hoy el de “los costes de producción” y la urgente necesidad de que “la ley de la cadena alimentaria empiece a funcionar ya, más allá del papel, para que no tengamos que vender por debajo de los costes de producción y cerrar explotaciones”.