John Deere entra en la batalla por los cultivos de alto valor

Cerca del 75% del valor de la producción vegetal de nuestro país lo aportan los denominados cultivos especiales (frutas y hortalizas, viñedo y olivar). El alto valor que aportan ha provocado un rápido crecimiento de la superficie que ocupan, a la vez que ha impulsado un importante desarrollo tecnológico.

Buena prueba de ello es la apuesta que hace dos años, la Asociación Nacional de Maquinaria Agropecuaria, Forestal y de Espacios Verdes (ANSEMAT) realizó con la primera edición de Agrievolution, un certamen monográfico para estos cultivos que contó con la presencia de los presidentes de John Deere y New Holland.

A nivel comercial, los cultivos especiales están captando cada vez más la atención de los grandes fabricantes. New Holland, líder en este tipo de cultivos, ampliaba su gama y lanzaba hace unos meses una nueva cosechadora versátil tanto para olivo como para almendro.

Kubota también está haciendo movimientos estratégicos. La compañía japonesa compraba Pulverizadores Fede, una firma tecnológica valenciana a la vanguardia en el desarrollo de atomizadores de productos fitosanitarios para este tipo de cultivos.

El último en posicionarse ha sido John Deere, que ha anunciado recientemente la creación en su sede corporativa en España de un hub de innovación que será puntero a nivel mundial en cultivos especiales. El centro ocupará buena parte de los 60.000 metro cuadrados de su centro de competencia en Parla (Madrid) para impulsar la colaboración público-privada orientada a generar conocimiento, innovación y emprendimiento.

Según la firma, esta nueva decisión responde a la apuesta estratégica de John Deere por continuar liderando el mercado peninsular y con ambición europea, dado el peso internacional de España y Portugal en el sector agroalimentario. La ambición es que Parla avance como referencia mundial y contribuya al crecimiento de soluciones innovadoras en cultivos de alto valor como la vid, el almendro, el pistacho, frutales o cítricos. “Es en esos cultivos donde la innovación puede generar mayor valor económico para nuestros clientes”, afirmaba la compañía.

“Estamos ante el edificio más emblemático de John Deere en Europa. Auditorio, campo de pruebas, salas de formación, etc., este entorno respira la historia de innovación de la compañía, que es también la del sector. España y Portugal son grandes potencias agrícolas, por lo que tiene sentido que desde este lugar impulsemos y lideremos la revolución tecnológica que está llegando al sector agroalimentario”, afirmaba Eduardo Martínez de Ubago, director de Negocio de John Deere Ibérica.

Mentes brillantes

John Deere ha entablado ya conversaciones avanzadas con universidades, otras multinacionales, escuelas de negocios, asociaciones y otro tipo de instituciones públicas y privadas, orientadas a generar iniciativas como viveros de empresas, formaciones o laboratorios de desarrollo e innovación.

“Ya no basta con invertir millones para avanzar a la velocidad de la tecnología. Innovar de verdad requiere espacios donde convivan mentes brillantes, ya sean de grandes multinacionales, de pequeños emprendedores, o de universidades”, subraya Martínez de Ubago. “Este proyecto nos ubica en el epicentro de la creación y el desarrollo de nuevas soluciones para la industria. Un lugar que movilizará inversión, ideas y talento, y que generará riqueza e impacto en la comunidad, en el entorno y en el sector.”