Fernando Ezquerro, presidente del Consejo Regulador de la DOCa Rioja: “El 99,9% del sector está en contra de desgajar la Denominación de Origen Rioja”

¿Cómo ha afrontado el sector del vino de La Rioja la pandemia? ¿Cuáles son los datos actualizados de la caída de ventas?

Como a todos los vinos de valor, nos está afectando mucho. Nuestro gran canal de ventas en España es el Horeca. Hemos mejorado las ventas en exportación y en Alimentación, pero nuestro gran canal se ha resentido de una forma manifiesta. La hostelería es un 60% de nuestro mercado nacional, que a su vez representa dos tercios de todas las ventas.

Poco a poco se están levantando las restricciones. ¿Empiezan a notarlo las bodegas?

En estos últimos meses las ventas se están recuperando, pero venimos de una caída fuerte. Tenemos sobre todo que acabar con las incertidumbres que no está provocando esta pandemia, porque no termina de marcharse. Volver a la vida normal sería la mejor noticia que podrían dar al sector.

Parece que vuelven de nuevo los cierres...

Sería demoledor. El verano no va a ser todo lo normal que esperábamos. Pero piense que en la mejor de las previsiones se está pensando en la llegada de la mitad de turistas que un año normal. Luego vamos a una campaña vital para nosotros como son las Navidades. Las pasadas fueron devastadoras y espero que este año mejoren.

Desde un punto de vista cuantitativo y cualitativo ¿cómo se plantea la vendimia en la denominación?

Este año no ha llovido tanto, no ha habido tantos problemas de enfermedades. Tenemos un viñedo equilibrado, con una producción también equilibrada y esa es la buena noticia que tenemos, junto al incremento de la exportación. Además, el Brexit ha acabado de una forma menos dura de la que temíamos y se han acabado los aranceles en Estados Unidos. Son los dos mercados más importantes en valor que tenemos.

Han vuelto a bajar los rendimientos de uva amparada. ¿Siguen sin digerirse los problemas de exceso de existencias?

Rioja es la región que más vinos criados tiene de España y la bajada de ventas repercute más que la producción. Esa disminución hace que todo ese vino que teníamos acumulado nos cree un exceso de oferta y por eso hemos bajado un poco los rendimientos para intentar adecuar de la forma más rápida con la demanda. En esa ecuación ratio existencias, lo más importante es que suba la demanda.

Rioja fue pionera en poner en marcha los vinos de zona y los viñedos singulares ¿Cómo está resultando la iniciativa?

Realmente muy bien. Rioja es una zona con una orografía muy abrupta y cada viñedo prácticamente es un mundo en sí mismo. Las diferentes orientaciones y altitudes hacen que se nos conozca como la tierra de los mil vinos. Esa heterogeneidad, esa variedad de coupages, es una ventaja respecto a otras zonas productoras y tenemos que aprovecharla. Y además Rioja es pionera. Somos la denominación, junto a Jerez, más antigua de España, y tenemos un sector muy dinámico. No paramos de aportar ideas y visiones de cómo acceder al mercado cada día con mejor producto y con mayor valor. Y para eso la diferenciación es una cosa importante.

¿Qué supondría la creación de la denominación de origen Vinos Álava?

Viñedos de Álava que es una figura que hemos recurrido porque entendemos que no se produce una diferenciación respecto a los viñedos y al vino normal de Rioja. De momento no sabemos quién está detrás de esto. Lo que sí sabemos es que casi el 99,9% del sector está en contra de desgajar la denominación y nuestra obligación es defender a ese 99% que está por defender la unidad de Rioja.

¿Cree que hay una intencionalidad política detrás?

Espero que no. Nadie nos ha hablado claro sobre este tema. Sus promotores nunca nos han trasladado cuál eran sus intenciones y quiénes eran.

En su plan estratégico prevén incrementar hasta un 44% el volumen de exportación, con China y Estados Unidos como principales mercados. ¿La supresión de los aranceles allana el camino?

El otro día hablaba de eso y en estos años estábamos creciendo en Estados Unidos, pero a costa de perder valor por los esfuerzos que hacían las bodegas por los aranceles. Este año hemos crecido un 4% en volumen y un 15% en valor. Las cifras han girado y estamos creciendo en volumen, pero mucho más en valor desde que se han quitado los aranceles. Es importante porque hace que podamos competir en igualdad de condiciones.

Rioja ha perdido cuota de mercado en los últimos años. ¿Qué se ha hecho mal?

Todo el mundo muerde al líder. Creo que Rioja ha hecho las cosas bien pero cada vez hay más vinos regionales, locales, denominaciones que están cogiendo fuerza. Volveremos a recuperar fuerza porque las modas van y vienen. A mí me preocuparía sobre todo que no estuviésemos dando un producto de calidad y no es el caso. Evidentemente es un tema que nos preocupa, pero es muy difícil recuperar las cuotas de un 40% del mercado, un 55% en vinos tintos y un 70% en vinos criados son muy difíciles de mantener. Aunque todavía somos los que más vendemos con diferencia.

Uno de los lastres del sector son los precios en origen. ¿Escapa Rioja a ese problema?

Una de las cosas del Plan Estratégico que yo tengo marcado en mi hoja de ruta con auténtico interés son los contratos a largo plazo. Si conseguimos horquillas de precios razonables para el viticultor y para la bodega, conseguiremos estabilizar el sector, que el agricultor tenga futuro y pueda afrontar las próximas inversiones que tiene que hacer en su explotación y haya dinamismo. Pero también a las bodegas las permitirá acometer los mercados con la tranquilidad de que el precio de la uva, pese a una helada o cualquier problema, no les vaya a tergiversar sus planes. Nos daría tranquilidad. Ese punto especulativo que tenemos todos de comprar lo más barato y venderlo lo más caro posible hace que no sea bueno para el conjunto de la denominación. En el Plan Estratégico lo tenemos marcado y yo, como soy viticultor, todavía más, pero creo que es importante que se lleguen a acuerdo entre las bodegas y los agricultores a largo plazo y a precios razonables.

Las cooperativas y el Consejo Regulador advirtieron del riesgo que la proliferación de instalaciones de energías renovable podía tener en el enoturismo.

Una de las grandes metas que nos marca el Plan Estratégico, siendo ya la región prácticamente más visitada de España en enoturismo, es crecer en esa actividad. El enoturismo, cada día más, es ver la bodega, el paisaje porque el momento de consumo del vino tiene que ver con otros placeres, como el gastronómico, visitar un viejo nevero, etc. Evidentemente no estamos en contra de las energías renovables, pero hay que encajarlas en el paisaje de manera que no estropeen una parte tan importante en La Rioja como es la parte enoturística.

¿Qué pediría al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación?

Tiene que pensar que el vino de España tiene que mejorar en lo que está peor que es en valor. Cuando los vinos más baratos suban de precio lo harán los más caros y viceversa. El Ministerio tiene que ayudarnos a todos, al sector, a generar valor. Eso es lo más importante. Pensar más en calidad y en valor y menos en volumen. Cuanto mejor le vaya al vino de España mejor le irá a La Rioja y cuanto mejor le vaya al vino de La Rioja mejor le ira al vino de España. Son vasos comunicantes y cuanto más valor generemos en el vino de España mucho mejor nos irá a todos.