Las vacunas ganan terreno a los antibióticos

En los últimos cuatro años, las ventas de productos biológicos de la industria veterinaria han crecido un 50%, el doble que la subida de los famacológicos

El principio “mejor prevenir que curar” va calando en el sector ganadero de nuestro país. La evolución de las ventas de productos biológicos de la industria veterinaria española refleja durante los últimos cuatro años un robusto incremento que en conjunto alcanza el 50% al pasar de los 195,51 millones de euros de 2015 a los 293,83 registrados el pasado año.

Un aumento que prácticamente duplica el de los productos farmacológicos, cuyas ventas se han incrementado un 24% en este periodo. De esta manera, el peso de los productos inmunológicos en las ventas totales de la industria veterinaria ha pasado del 22,56% al 28,53% en estos cuatros años.

El crecimiento de los productos que activan el sistema inmunitario para luchar contra las enfermedades está directamente relacionado con la ofensiva que desde 2014 se ha puesto en marcha contra el uso abusivo de los antibióticos, cuyo efecto directo es la aparición de resistencias a los antimicrobianos.

“Hay un efecto indudable entre el aumento de las ventas de vacunas con la puesta en marcha de medidas para fomentar el uso responsable de antibióticos en veterinaria y el impulso a los que fomentan la prevención y, entre ellos, están los biológicos”, afirma Santiago de Andrés, director general de Veterindustrial, la patronal del sector. El directivo recuerda que según los datos del Plan Nacional frente a la Resistencias a los Antibióticos (Pran), que coordina la Agencia Española del Medicamento, desde 2014 el uso de antibióticos en veterinaria se ha reducido un 50%. “Los planes puestos en marcha se están siguiendo de forma masiva por parte de los productores y se está reduciendo mucho el uso de antibióticos y los biológicos son una herramienta básica”, asegura.

De Andrés explica las ventajas de la utilización de productos de origen biológico en la sanidad animal. “Se trata de que los antibióticos se utilicen tanto como sea necesario, pero tan poco como sea posible. Si tu consigues que la enfermedad no llegue a las producciones reduces la necesidad de utilizar fármacos para tratarla.

En ese sentido se están realizando grandes avances en terrenos de bioseguridad, bioprevención y en la utilización de vacunas, algo que en Veterinaria no es nuevo porque tenemos una amplísima tradición con virólogos y epidemiólogos super expertos”.

A ello se une el hecho de que España es una potencia en producción de biológicos. En España hay 29 plantas de fabricación de medicamentos veterinarios y siete son de producción de vacunas que se utilizan en animales de compañía y de producción de todo el mundo. En el campo de sanidad humana en nuestro país no hay ninguna.

“La industria de sanidad animal española es líder a nivel europeo, somos el tercer mercado en la UE y uno de los más relevantes a nivel mundial, estamos vendiendo a más de 90 países y las exportaciones suponen un porcentaje muy alto de las ventas totales porque nuestras empresas son muy competitivas a nivel internacional”, indica el director general de Veterindustria.

Este posicionamiento es fruto también de una importante apuesta por la I+D+i. Desde Veterindustria lideran a través de la fundación Vet+i, que integra a centros de investigación públicos y privados, a la profesión, la universidad, la administración pública, y las asociaciones de productores, la transferencia tecnológica a través de la colaboración público privada. “Esa apuesta supone que al final se traduzca en soluciones que sean útiles, en herramientas, servicios y productos que vayan a prevenir enfermedades que son relevantes para los sectores y, también, para la salud pública”.

Estratégicos en la salud pública

En este sentido, Santiago de Andrés destaca el enfoque One Health, que no distingue en salud humana y animal, sino que es un todo indisoluble. “No hay que olvidar que la mayor parte de las enfermedades emergentes son de origen zoonósico, según la Organización Mundial de Salud Animal (OIE), y lo estamos viendo ahora con el coronavirus. Si somos capaces de parar la enfermedad en el animal fíjate lo que nos evitamos en el campo humano. Nuestra importancia no es solo directa en el campo de los animales sino también estratégica en el de la salud pública”.